COMO EL TEMA DE MI BLOG: “EL CIELO ES EL LIMITE”

 

Hoy les quiero compartir mis trabajos, realizados con esfuerzo y dedicación demostrando que todos tenemos capacidades que debemos aprovechar.

La mesa redonda y los siete caballeros de la navidad

 

Cierta vez en la aldea de Santa, se reunieron los seres que hacen posible la navidad para arreglar ciertos temas en los que aún no estaban de acuerdo.

 Santa los sentó en una mesa redonda, pero al ver que nunca se iban a poner de acuerdo decide coger las riendas él.

En lo primero que nunca se pudieron poner de acuerdo fue en la decoración de la aldea, todos los que la habitaban la querían diferente este año, pero lo que más le preocupaba a Santa era que por estas discusiones iba a separar a su gente y olvidarían el verdadero espíritu navideño.

 Se le ocurrió un gran plan que consiste en escoger siete personas  representantes de todos los habitantes de su aldea para sentarles alrededor de una mesa redonda de cristal y que ellos mismo preparen la navidad de este año.

Cuando los habitantes se dieron cuenta de la decisión de Santa se dieron a la tarea para escoger  a los que iban a estar en dicha mesa. Santa los selecciono, siete personajes de su propia aldea  y cuando los escogió los reunió en la mesa redonda de cristal. 

Los ubicó alrededor de una mesa redonda de cristal con unas sillas de madera había un elfo, un reno, Santa, mamá Claus, un muñeco de nieve, un pingüino y un oso polar.

Ellos empezaron a decidir todo lo que había por realizar para la navidad, hasta que Santa decidió ponerles tareas a cada uno para que así ellos hicieran su parte y la aldea quedara lista a tiempo para dichas festividades.

A los elfos les tocó decorar el árbol y construir los juguetes, a mamá Claus adornar las galletas, a los renos poner las luces, al pingüino armar el nacimiento, a los osos polares  poner las guirnaldas y terminar de adornar la aldea, a Santa le corresponde arreglar el trineo y ver la lista de obsequios.

Cuando nuestros personajes terminaron las tareas asignadas, Santa los reunió a tomar un rico chocolate caliente que les hizo mamá Claus.

Santa quedó muy satisfecho con el trabajo realizado por los habitantes de su aldea.

Las reuniones de la mesa redonda se siguieron realizando alrededor de la mesa que Santa creo para solucionar los problemas de aquellos que nunca se pusieron de acuerdo con lo que no les gustaba, además se tratan otros tipos de temas importantes como es el diseño de los juguetes entre otras cosas más.

Santa está muy contento de que las reuniones de la mesa redonda hayan funcionado como él se lo esperaba.

Nuestros personajes de la aldea entendieron que trabajando en equipo podrían acabar todos los proyectos y es más divertido trabajar juntos que por separado.

Vivieron muy felices para siempre.

                                                   FIN 

 

 

 

A Las puertas del alma

 

 

Dentro de nosotros podremos encontrar unas puertas  

Cuando las vemos nos puede dar temor mirarlas

Estas puertas tienen encerradas nuestras mayores ilusiones,

 En una parte de ella están nuestros mayores sueños y proyectos.

 

Al otro lado de la habitación están las puertas más oscuras

 Que quisiéramos tuvieran por siempre encerrados

 Nuestros mayores demonios, miedos y decepciones.

 Y no permitan que nuestros fracasos estén en libertad.

 

Pero el anhelo de sentirme bien crea fuertes cadenas

Que los va a mantener encerrados por siempre

 Y al cabo de los años con la ayuda de las personas

Tendré la tranquilidad para dejarlas abiertas.

 

 

Las puertas que siempre quiero y debo dejar abiertas,

Son las puertas blancas y no las negras.

 

Las ansias de salir adelante me animan

A poder ser mejor en todo lo que me proponga,

A recolectar cosas buenas de las maravillas que tiene la vida

 Y por fin ver lo que me puede ofrecer.

 

Los retos  más que las puertas del alma, son las del destino.

 No hay alma completamente limpia ni libre de culpa

Pero lo que importa es que tenemos la capacidad

Para poder estar bien con nosotros mismos y con los demás.

 

Reflexión: si tú te sientes identificada con estas letras te invito a que realices una caja y escribas tus sentimientos y por último guárdalos allí, esto te ayudará para que abras todas las puertas de tu corazón y realmente seas feliz.

EL CABALLERO COBARDE

 

Érase una vez un caballero que no era nada valiente de un antiguo pueblo que era muy bello, pero al mismo tiempo era muy humilde.

 Al fondo de aquel pueblo estaba un castillo, donde se llevaba a cabo una guerra en contra de un dragón que les robaba sus propios cultivos y otras cosas que hacían los aldeanos para sobrevivir en aquel pueblo ya que no había muchas oportunidades en la aldea.

Eso mismo le estaba pasando a nuestro amigo el dragón; pero resulta que el dragón sí había conseguido un trabajo y sí había tenido esa oportunidad.

El dragón trabajaba en las canteras mágicas fundiendo metal con su fuego para hacer espadas y demás armas para la guerra hasta que, un día, en aquellas canteras mágicas se les ocurrió recortar personal y él se quedó sin trabajo.

Lo que ellos no sabían eran los motivos por lo que  nuestro dragón lo hacía en realidad. Nuestro amigo el dragón tiene familia y él era el único sustento de ella. Cuando el dragón se quedó sin el trabajo de las canteras encantadas, de pronto le entró una gran (¿una gran qué?) idea y le ganó la desesperación y lo único que a él se le ocurrió fue ir a las aldeas cercanas y robarles el sustento a los pobladores de aquellas regiones aledañas para poder alimentar a su familia.

Nuestro caballero fue convocado por el rey del castillo para que él los defendiera del dragón que estaba aterrorizando a los habitantes del pueblo, hasta los del castillo. El rey sabía que nuestro caballero era la persona más cobarde del mundo, pero nuestra mayor debilidad la podemos convertir en nuestra mayor fortaleza, eso es lo que pensaba caballero en esos momentos.

Pero eso se imaginó antes de que el rey le diera los detalles de su próxima misión que era ir a la cueva del dragón a matarlo por haberles robado todos los cultivos y por haber aterrorizado a los aldeanos.

El caballero se fue a la cueva del dragón con todo el miedo del mundo, pero lo que él no se esperaba es que aquel dragón tenía una gran familia. "Por ellos robaba a las aldeas aledañas, para que mi esposa dragona y mis hijos pudieran comer y no pasaran hambre. Por ellos lo hacía, pero siempre supe que lo que hacía no está bien".

El caballero le pregunto al dragón: "¿Por qué lo haces?"

El dragón le explico a nuestro caballero por qué lo hacía: es que desde que él se quedó sin trabajo lo empezó a hacer. "La desesperación me ganó, no hallé otra salida que empezar a robar a las aldeas cercanas y al mismo tiempo aterrorizar a toda persona que se atravesara en mi camino solo para conseguir algo de comida para mi familia".

"Pero eso no es justificación para lo que haces", agregó nuestro caballero.

"Pero yo no soy nadie para juzgarte. Más bien te vengo a ayudar; te propongo un trato: justo hablaré con el rey para que, en vez de matarte, te dé el trabajo de mensajero. Tú puedes realizarlo muy bien y que al final tu antiguo jefe se dé cuenta de que echarte fue un gran error". El dragón pensó la propuesta de nuestro amigo el caballero y le respondió que sí.

Al siguiente día, el caballero fue a contarle todo al rey, entonces le dijo que sí él le iba a dar el trabajo que estaba vacante. El caballero se dio cuenta de que la fortaleza no viene de los músculos sino de la cabeza. Al dragón le fue muy bien en el trabajo y su familia no volvió a sufrir ninguna necesidad.

Desde entonces, el caballero que alguna vez fue cobarde ahora es considerado como valiente.

 

FIN